La desnutrición es una de las principales causas de muerte infantil en niños menores de cinco años. Y en países como Chad, República Centroafricana, Etiopía y Sudán del Sur, es especialmente difícil conseguir que los refugiados que huyen de los conflictos en sus países tengan acceso a alimentos ricos en nutrientes y alimentación terapéutica que les permitan sobrevivir y llevar una vida sana en el campo al que llegan.
Además, desde 2014, la crisis alimentaria ha golpeado especialmente a estos. Las raciones de comida se han reducido hasta un 50%, dejando a niños y adultos smuy expuestos a las desnutrición, intentando sobrevivir con solamente 800 calorías al día.
Todas las personas necesitamos una alimentación nutritiva e hidratación para estar sanos, sobre todo para los niños en sus primeros meses de vida, para garantizar su correcto crecimiento y desarrollo.
Para minimizar los efectos de las deficiencias nutricionales y la malnutrición, ACNUR dispone del Programa de Alimentación y Nutrición a fin de poder proporcionar una alimentación de calidad a más de 2,5 millones de refugiados en los cuatro países de África.
Asegurar que los refugiados procedentes de Sudán del Sur tengan acceso a alimentos ricos en nutrientes y alimentación terapéutica que les permitan sobrevivir y llevar una vida sana.
Con 3.000€, 200 niños y niñas refugiados desnutridos en Etiopía tendrán leche terapéutica durante un mes.
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